La promoción del turismo y la gastronomía en las comunidades pesqueras es una estrategia clave que reduce la presión sobre los recursos marinos, ofreciendo alternativas de desarrollo productivo a los y las pescadores y pescadoras. Al diversificar las fuentes de ingresos, estas comunidades pueden disminuir su dependencia exclusiva de la pesca, lo cual es crucial para la conservación de los ecosistemas marinos. Esta diversificación no solo impulsa la economía local, sino que también preserva su rica herencia cultural.
En ese marco, el proyecto Humboldt II viene apoyando a la comunidad pesquera de Puerto Aldea en el desarrollo de actividades de diversificación productiva, como la 7ª versión de la Fiesta Costumbrista de Puerto Aldea, celebrada los días 17 y 18 de febrero. Organizada por la Agrupación Caleta Puerto Aldea en conjunto con el Municipio de Coquimbo, este evento se ha convertido en un emblema de la región.
La inauguración de la feria contó con la presencia de funcionarios y autoridades locales como Gonzalo Pardo, delegado de Tongoy, representantes de Carabineros y la Armada. El domingo, la fiesta recibió la visita del alcalde de Coquimbo, Sr. Ali Manucheri, quien pudo disfrutar de la rica cultura y gastronomía de la región.
La fiesta ofreció una amplia gama de puestos que presentaban desde comidas típicas hasta artesanía y souvenirs, reflejando la diversidad y riqueza cultural de Puerto Aldea. Los asistentes disfrutaron de una variedad de delicias culinarias preparadas con ingredientes frescos del mar, lo que les permitió apreciar directamente la conexión entre el mar y el campo de la localidad.
Este evento anual ha logrado captar cada vez más el interés de los visitantes, convirtiéndose en una tradición destacada de la temporada estival. Su éxito no solo ha realzado el turismo en la localidad, sino que también ha impulsado el emprendimiento gastronómico, aprovechando los bancos naturales de ostiones, almejas, chochas, jaibas, machas, entre otros. Así, la Fiesta Costumbrista de Puerto Aldea se ha establecido como un pilar fundamental para el desarrollo sostenible, la conservación cultural y la prosperidad económica de esta comunidad pesquera.
